1 Corintios 4 - La Biblia Textual

Libro de 1 Corintios
Capitulos:

12345678910111213141516

1 - Así, considérenos todo hombre como servidores de Cristo y administradores de los misterios de Dios.

2 - Ahora bien, se requiere de los administradores que cada uno sea hallado fiel.

3 - Yo en muy poco tengo el ser juzgado por vosotros o por tribunal humano, y ni siquiera yo mismo me juzgo,

4 - porque aunque de nada me acusa mi conciencia, no por eso soy justificado, pues el que me juzga es el Señor.

5 - Así que, no juzguéis nada antes de tiempo, hasta que venga el Señor, el cual sí sacará a luz lo oculto de las tinieblas y pondrá de manifiesto las intenciones de los corazones: entonces la alabanza le vendrá a cada uno de parte de Dios.

6 - Pero estas cosas, hermanos, las he aplicado en figuras a mí y a Apolos, por causa de vosotros, para que en nosotros aprendáis lo de no sobrepasar lo que está escrito, para que ninguno de vosotros se vuelva arrogante a favor del uno contra el otro.

7 - Porque ¿quién te distingue? ¿o qué tienes que no hayas recibido? Y si es cierto que lo recibiste, ¿de qué te jactas como si no lo hubieras recibido?

8 - Ya estáis saciados, ya os enriquecisteis, sin nosotros reinasteis. ¡Ojalá hubierais llegado a reinar para que también nosotros reináramos con vosotros!

9 - Porque pienso que Dios nos ha exhibido a nosotros los apóstoles como a postreros, como a sentenciados a muerte, pues fuimos hechos espectáculo para el mundo, para los ángeles y los hombres.

10 - Nosotros, necios por amor de Cristo, vosotros prudentes en Cristo, nosotros débiles, vosotros fuertes; vosotros, honorables, nosotros, sin honor.

11 - Hasta esta hora padecemos hambre y tenemos sed, vestimos harapos, y somos golpeados, y deambulamos de sitio en sitio;

12 - nos fatigamos trabajando con nuestras propias manos; siendo maldecidos, bendecimos; siendo perseguidos, soportamos;

13 - siendo difamados, consolamos. Hasta ahora hemos llegado a ser como la escoria del mundo, el desperdicio de todos.

14 - No os escribo estas cosas para avergonzaros, sino que os amonesto como a hijos míos amados.

15 - Porque aunque tengáis diez mil pedagogos en Cristo, no tenéis muchos padres; porque en Cristo Jesús, yo os engendré por medio del Evangelio.

16 - Por tanto, os ruego, sed imitadores de mí.

17 - Por esto mismo os envié a Timoteo, quien es mi hijo amado y fiel en el Señor, el cual os recordará mi proceder en Cristo, tal como enseño dondequiera en toda iglesia.

18 - Mas algunos están envanecidos, como si yo nunca hubiera de ir a vosotros.

19 - Pero iré pronto a vosotros, cuando el Señor quiera; y conoceré, no las palabras sino el poder de los que se han envanecido,

20 - porque el reino de Dios no consiste en palabras, sino en poder.

21 - ¿Qué queréis? ¿Iré a vosotros con vara; o en amor y con espíritu de mansedumbre?